Prioridade Bar

Ese día que había salido del hotel bajo un sol abrazador y tomé el ómnibus de paseo que hace el recorrido por la ciudad y sus alrededores, nunca pensé que el lugar para comer resultara ser esto. Habiendo regresado del paseo en las lanchas que hacen el recorrido por el río Tajo, bajo los puentes y admirado las laderas con sus casitas casi colgando de las pendientes, pregunté a una de las señoritas que atendía la Oficina de los Tours por el río qué lugar me recomendaría para comer dado que todos los restaurantes que por allí había estaban llenos de gente. Me indicó el camino para llegar hasta allí, pasé por debajo de la arcada de piedra que conducía al lugar y viendo lo que veía preferí quedarme fuera bajo una sombrilla y pedir lo más simple que pudiese comer. Había un par de parejas, se acercó un mozo y pedí salmón grillado con arroz blanco y agua mineral si gas. Por lo que demoraron debieron ir a pescarlo al mar y mientras aguardaba observe el punto, sucio, con gran cantidad de moscas que procuraban espantar con un ventilador y bajo unas rojas sombrillas que apenas cubrían el sol. Obvio que repasé los cubiertos que me trajeron con alcohol en gel que llevo en la cartera, pagué como si hubiese comido en el restaurante más caro de Porto y me fui. La verdad sea dicha, imposible de recomendar porque el lugar es HORRIBLE!!!.

Naquele dia, ele havia deixado o hotel sob um sol escaldante e levou o ônibus que faz o passeio pela cidade e seus arredores, eu nunca pensei que o lugar para comer acabou por ser isso. Tendo retornado do passeio sobre os barcos que fazem o passeio do rio Tejo, debaixo de pontes e admirado das pistas com suas casas quase penduradas nas encostas, pedi uma das senhoras que participaram do Escritório de Tours no rio que lugar Eu recomendo para comer porque todos os restaurantes não tinham estavam cheias de pessoas. I apontou o caminho para chegar lá, passei sob o arco de pedra que conduz ao local e ver o que eu vi preferiu ficar fora sob um guarda-chuva e perguntar o que mais simples do que eu podia comer. Havia um par de casais, um garçom veio e pediu salmão grelhado com arroz branco e água mineral, se o gás. Então eles tiveram que ir para pegá-lo atrasou o mar e observar enquanto espera ponto, sujo, com lotes de moscas que tentaram assustar com um ventilador e sob guarda-chuvas vermelhos que mal cobria o sol. Obviamente eu revi que trouxe-me coberto com gel de álcool que está na minha carteira, paga como se tivesse comido no restaurante mais caro da Porto e à esquerda. Verdade seja dita, impossível recomendar porque o lugar é HORRÍVEL !!!.