Ida y Vuelta
confortável e moderno hotel no centro de Madrid
Cómodo y moderno hotel en el centro de Madrid
El mes de enero pasado busqué un hotel para estar dos noches durante Fitur (año 2015). Necesitaba que no fuera demasiado caro y estuviera en el centro de Madrid. Tenía que estar cerca de Atocha y de Gran Vía y además quería que tuviera buena conexión con IFEMA para asistir a la Feria de Turismo Internacional que se celebra allí cada mes de enero.
La búsqueda no fue demasiado sencilla ya que había mucha oferta pero bastante cara por ser días de feria, muchos alojamientos estaban llenos y otros, sencillamente, disparados de precio. Así que cuando encontré una habitación adecuada en el hotel Innside Madrid Suecia me puse contenta.
Ha sido un hotel clásico en Madrid siempre, se llamaba hotel Suecia ya que pertenecía en parte a la Casa de Suecia en Madrid durante los años 50 del siglo XX, siendo un reducto escandinavo en plena capital de España y además se hizo famoso por alojar a personajes como Hemingway o el "Ché" Guevara.
En la actualidad la fachada apenas presencia cambios respecto al antiguo hotel, es clasicista y pasa desapercibida con la majestuosidad de edificios contiguos como el Círculo de Bellas Artes. Eso sí, al cruzar la entrada todo cambia y el ambiente se transforma en pura modernidad curvilínea en la recepción que a la vez sirve de distribuidor hacia un lounge y de acceso a la zona de cafetería y desayunos.
El personal de la entrada es distante pero amable, como se supone en un hotel de negocios. Atienden a la perfección las múltiples necesidades de huéspedes varios con tranquilidad para el enorme bullicio que había esos días ajetreados de enero.
Mi habitación se encontraba en una de las plantas más altas y daba a un patio interior por lo que era muy tranquila. Era amplia, con una cama doble, zona de escritorio y un baño muy moderno separado apenas por una mampara del dormitorio (el lavabo y la ducha) y ya aparte la zona de w.c. Esto puede resultar incómodo si viajas con alguien y buscas intimidad para el aseo personal, como en mi caso iba sola, pues no hubo problema.
La terraza del ático se asoma con una vista impresionante a las azoteas del centro madrileño y ofrece una piscina en forma de lengua de agua para aliviar los calores veraniegos.
El desayuno era abundante y estaba bien resuelto en un buffet que se asomaba a través de grandes cristaleras a la calle del Marqués de Casa Riera, por lo que era entretenido hacerlo aunque no tuviera a nadie para conversar.
Las comunicaciones son inmejorables, con el metro Banco de España a dos pasos y la Gran Vía, el Paseo del Prado y los Museos al alcance de la mano.
Buena opción, en definitiva para pasar en Madrid unos días de trabajo o asueto en pleno centro y sin dejarte una fortuna.
Em janeiro passado olhou para um hotel para ficar duas noites no Fitur (2015). Eu precisava que não era muito caro e estava no centro de Madrid. Eu precisava estar perto de Atocha e Gran Vía e também queria que ele tenha boa conexão com IFEMA para participar da Feira Internacional de Turismo realizada há cada janeiro. A busca não foi tão fácil como havia muitos na oferta, mas muito caro para ser dias de feira, muitas acomodações estavam cheios e outros preço simplesmente subindo rapidamente. Então, quando eu encontrei uma sala apropriada no Innside Madrid Suécia hotel que eu tenho feliz. Era um hotel clássico em Madrid sempre, chamado hotel Suécia, uma vez que pertencia em parte à Casa da Suécia em Madrid durante os anos 50 do século XX, sendo um reduto escandinava na capital de Espanha e também se tornou famosa por sediar personagens como Hemingway ou "Che" Guevara. Actualmente, a presença fachada dificilmente muda a partir do antigo hotel, é classicista e passa despercebido com a majestade de edifícios adjacentes, como o Círculo de Bellas Artes. Sim, através da entrada tudo muda e o ambiente torna-se modernidade curvilínea pura na recepção que serve simultaneamente como um distribuidor para um lounge e acesso à área de café e café da manhã. A equipe na entrada é distante, mas amigável, como assumido em um hotel de negócios. Perfeitamente servir as muitas necessidades de vários convidados com tranquilidade para o enorme buzz que tinha naqueles dias movimentadas de janeiro. Meu quarto foi em um dos andares mais altos e vista para um pátio por isso era muito calmo. Era espaçoso, com uma cama de casal, uma secretária e uma moderna casa de banho mal separados por uma divisória do quarto (pia e chuveiro) e área separada wc Isso pode ser inconveniente se você estiver viajando com alguém à procura de um pouco de privacidade para aliciamento, como no meu caso estava sozinho, então não há problema. O terraço tem vista para uma cobertura vista impressionante do centro de Madrid e dispõe de uma piscina em forma de língua de água para aliviar o calor do verão. Foi em abundância e foi bem resolvida em um buffet que olhou para fora através de grandes janelas para a rua Marqués de Casa Riera, então foi divertido, mas não tem ninguém para conversar. As comunicações são excelentes, com o Banco metro de Espanha dois passos e Gran Via, o Paseo del Prado e museus ao alcance da mão. Boa escolha, em última análise, para passar alguns dias em Madrid trabalhando no centro ou dia de folga sem deixar-lhe uma fortuna.
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